La obesidad ha aumentado rápidamente en las últimas décadas, duplicándose o triplicándose en más de 70 países. Las personas con obesidad tienen mayores riesgos de desarrollar resistencia a la insulina (RI), disfunción de células beta, diabetes tipo 2, enfermedad del hígado graso no alcohólico, la enfermedad cardiovascular (ECV), desarrollo de varios tipos de cáncer y discapacidad.
Además, la obesidad estás asociada con la mortalidad por todas las causas, especialmente en adultos menores de 65 años y en edad la infanto-juvenil,
La obesidad se define como la acumulación excesiva de masa grasa y los tejidos adiposos (TA) son el principal sitio de almacenamiento de grasa en humanos.
Los (TA) desempeñan papeles críticos en la salud sistémica al funcionar como órganos metabólicos, endocrinos e inmunes y una mayor masa de estos tejidos adiposos y su disfunción en la génesis de obesidad es considerado un factor patológico importante para sus enfermedades asociadas.
Los (TA) Tejidos adiposos se distribuyen en todo el organismo y dependiendo de las ubicaciones, sus impactos en la actividad cardiometabólica generan más riesgos y estos difieren de modo que la acumulación de grasa en la parte subcutánea de la parte inferior del cuerpo es más favorable mientras que la acumulación de grasa en la parte superior del cuerpo, especialmente dentro de la cavidad intraabdominal, produce efectos deletéreos y complicaciones severas sobre las enfermedades cardiometabólicas.
La grasa visceral es la causante del depósito de grasa ectópica, acumulación de grasa alrededor de órganos que perjudican las funciones de los órganos afectados, aumentando el riesgo de enfermedad, además, la grasa visceral se vuelve más disfuncional durante el desarrollo de la obesidad.
Varias hipótesis sugieren que cuando el aumento del aporte de grasa visceral en el almacenamiento en los tejidos adiposos llega a su límite, la grasa se desborda en los depósitos intraabdominales y la adiposidad visceral puede ser un marcador de depósito de grasa ectópica, determinando sus riesgos y en este caso se ha demostrado que es el principal factor etiológico de las enfermedades cardiometabólicas.
Durante el desarrollo de la obesidad, es necesario un estudio más que completo de cada caso en particular para estudiar factor de riesgo y sus complicaciones y determinar cuál es la mejor terapéutica adecuada en estos pacientes.
Dr. Toledo-Pimentel
Aparato Digestivo
Unidad de Patologías de la Obesidad


OBESIDAD Y ENFERMEDADES CARDIOMETABÓLICAS

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