¿Cómo se diagnostica una enfermedad del aparato digestivo?
Sabemos que el Aparato Digestivo es un largo órgano que empieza en la boca y acaba en el ano. Mide este tubo digestivo mide unos once metros de longitud aproximadamente en su totalidad y en el pueden caber múltiples y diversas enfermedades que requieren del conocimiento y la tecnología necesarias hoy en día para el abordaje integral de ellas, un diagnóstico precoz y un tratamiento eficaz para obtener unos resultados lo más satisfactorios posible para los pacientes.
El Dr. Víctor Toledo-Pimentel posee una amplia experiencia en el diagnóstico y tratamiento de las diversas enfermedades del Aparato Digestivo.
Su formación en el Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Clínic i Provincial de Barcelona, su experiencia en diversas clínicas y hospitales durante varios años le ha capacitado para ser un especialista de referencia en España, y en especial en Alicante, lugar donde ejerce una gran parte de su actividad, consta con múltiples publicaciones realizadas, un aprendizaje constante de técnicas diagnósticas y terapéuticas no solo en el campo de las enfermedades digestivas, sino también en la relación de estas con Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria.
Métodos diagnósticos en las enfermedades del aparato digestivo
Estos exámenes pueden incluir cualquiera o una combinación de lo siguientes:
Exámenes de laboratorio:
a) Analítica General
En función de la visita inicial se solicitan analítica general completa de sangre y orina, en especial función hepática y renal como también marcadores de tumores si son necesarios.
b) Examen de sangre oculta en las heces
Un examen de sangre oculta en las heces busca indicios de sangre escondida (oculta) en las heces. Se coloca una cantidad muy pequeña de heces en una tarjeta especiaI, y luego se examina en el consultorio del médico o se envía al laboratorio. Es un método de detección de los inicios del cáncer de colon.
c) Cultivo de heces y determinación de sangre, parásitos y digestión
Un cultivo de heces busca indicios de la presencia de bacterias anormales en el tracto digestivo que pueden causar diarrea y otros problemas para lo cual se solicitan la determinación de elementos anormales en el contenido. Se recolecta una pequeña cantidad de heces y se envía al laboratorio por medio del consultorio del médico.
Exámenes por imagen:
d) Radiografía de Abdomen simple
e) Estudio de tránsito colorrectal baritado (enema opaco)
f) Tomografía computarizada (Escáner o TAC)
g) Imágenes por Resonancia Nuclear Magnética
h) Ecografía
i) Tránsito esófago gastrointestinal (GI) superior baritado (También llamada
esofagografía.)
j) Colonoscopia Virtual
Procedimientos endoscópicos
Estos procedimientos diagnósticos se realizan bajo sedación para evitar molestias al paciente.
1. Colonoscopia
La colonoscopia (FCS) es un procedimiento no quirúrgico que le permite ver la longitud completa del intestino grueso y a menudo puede ayudar a identificar crecimientos anormales, tejido inflamado, úlceras, pólipos, diverticulos, cáncer y lesiones con hemorragia. Consiste en la introducción de un tubo con luz, largo y flexible, a través del recto hasta el ciego, unión del intestino grueso con el delgado. El colonoscopio le permite ver el revestimiento del colon, extirpar tejido para exámenes adicionales y posiblemente tratar terapéuticamente.
2. Esofagogastroduodenoscopia (Fibrogastroscopia)
Una FGS (Fibrogastroscopia o endoscopia superior) es un procedimiento que le permite al médico examinar el interior del esófago, el estómago y el duodeno. Un tubo con luz, delgado y flexible, llamado endoscopio, se pasa por la boca y la garganta, y luego por el esófago, el estómago y el duodeno. El endoscopio le permite ver dentro de este área del cuerpo, así como introducir instrumentos a través del endoscopio para tomar muestras de tejido y realizar una biopsia (si es necesario).
3. Colangio Pancreatografía Retrógada Endoscópica
Es el estudio diagnóstico y terapéutico del páncreas y la vía biliar, que combina la endoscopia con los Rayos X para su realización. Se utiliza un duodenoscopio, que es un endoscopio de una longitud mayor a la del gastroscopio (que se usa para la esofagogastroduodenoscopia) que además tiene visión lateral (la mayoría de endoscopios tiene visión frontal). La visión lateral permite la localización de la papila mayor o ampolla de Vater y de la papila menor o accesoria, ambas se encuentran en la segunda porción de duodeno.
Usualmente es el ampolla de Vater el punto de interés ya que es a través de esta que drena tanto la vía biliar como el conducto pancreático principal. La papila menor solo es de interés en el estudio de una anomalía congénita llamada páncreas divisum.
Al canular el ámpula de Vater se puede inyectar medio de contraste y es allí cuando entran a funcionar los Rayos X, por medio de fluoroscopía que es un estudio dinámico. Se observa como en una película cómo avanza el medio de contraste y dibuja la vía biliar o pancreática. Permite determinar su anatomía y detectar deformidades, presencia de cálculos, de tumores o de estrecheces. Si se detecta alguna anormalidad, con frecuencia se pasa a la fase terapéutica
4. Manometría anorrectal
Este examen ayuda a determinar la fortaleza de los músculos del recto y del ano. Estos músculos normalmente se contraen para contener las heces y se relajan al defecar. La manometría anorrectal es de ayuda para evaluar malformaciones anorrectales y la enfermedad de Hirschsprung, entre otros problemas. Se coloca un tubo pequeño en el recto para medir la presión ejercida por los músculos del esfínter que rodean el canal.
5. Manometría esofágica
Este examen ayuda a determinar la fortaleza de los músculos del esófago. Es útil en la evaluación del reflujo gastroesofágico y las anomalías relacionadas con la deglución. Se introduce un tubo pequeño en la nariz, y luego se pasa por la garganta y finalmente al esófago. A continuación se mide la presión que los músculos del esófago producen en reposo.
6. Monitorización del pH – phmetría
Un monitor del pH esofágico mide la acidez dentro del esófago. Es de ayuda para evaluar el reflujo gastroesofágico (su sigla en inglés es GERD). Se coloca un tubo delgado de plástico en una fosa nasal, se pasa por la garganta y luego por el esófago.
El tubo se detiene exactamente por encima del esfinter esofágico inferior, que es la conexión entre el esófago y el estómago. Al final del tubo dentro del esófago hay un sensor que mide el pH o la acidez. El otro extremo del tubo fuera del cuerpo está conectado a un monitor que registra los niveles de pH por un período de 12 a 24 horas.
Durante el estudio se recomienda la actividad normal, y se lleva un diario de los síntomas experimentados, o de la actividad que podría ser indicio de reflujo, como las náuseas o la tos. Las lecturas del pH se evalúan y se comparan con la actividad del paciente durante ese período.
7. Biofeedback Recto anal – Periné
¿Qué es el Biofeedback recto anal y para que sirve?
El biofeedback es una técnica que consiste en la reeducación de la función esfinteriana anal y la modificación de la sensibilidad rectal. Se realiza a través del registro manométrico mediante programa computarizado de la actividad motora rectal que enseña en forma visual y auditiva, a cambiar un parámetro fisiológico, bajo la supervisión y motivación de un médico. Es un método de aprendizaje o rehabilitación que se puede utilizar en el tratamiento de determinados tipos de estreñimientos crónicos e incontinencia anal (escape no voluntario de gas y de heces), encopresis, dolor anal funcional, alteraciones del suelo pélvico (periné descendente con/sin prolapso con/sin rectocele), es decir múltiples patologías del suelo de la pelvis.
8. Metaplasia Intestinal
9.Cromoendoscopia
10.- TEST DE ALIENTO ESTUDIO DE INTOLERANCIAS ALIMENTARIAS
11.- TEST ALIENTO DETERMINACIÓN DE HELICOBACTER PYLORI
12.- DETERMINACI´ÓN DE SOBRECRECIMIENTO BACTERIANO (SIBO)